SIETE MARAVILLAS PARA ALCANZAR EL CIELO!
martes, 16 de diciembre de 2014
jueves, 20 de noviembre de 2014
A soñar un rato…
Hace unos años, me acordaba que subía la escalera del
altillo de lo que hoy es mi habitación, para ese entonces estaba sin terminar y
pasaba las tardes tirado en un colchón tirado en el piso, escuchando lo que fue
el primer cd que me grabe con temas de Calamaro en un discman que le habían
regalado a mi hermana para su cumple, también pensaba como seria mi vida con
los años, donde me encontraría con el paso del tiempo…los años pasaron, ahora
toda la música en un celular, pero yo me veo de nuevo en mi habitación ya
terminada tirado por ahí escuchando música con mis auriculares Pioneer y como
dice el tema de Iván Noble, estoy soñando un rato…capaz ahora recordando lo que
pasaba hace años, lo que viví desde que era mas chico y pensando en lo que
vendrá. Mientras tanto la música, los sueños…
Gustavo Girardi
martes, 4 de noviembre de 2014
Porque vos estas ahí, estas como todos los días en la parada
del colectivo, estas reflejado en la vidriera del negocio que cruzas todos los
días, y no hay un segundo que inconscientemente no pienses en como será y quien
será la persona que te va a tocar el alma. Y así como miras la hora de tu reloj
pulsera y ves que llegas tarde al trabajo, todo lo relacionado con el tiempo te
lleva a otro nuevo día, a otras horas y momentos en que estas solo y aun
esperando, de la misma manera que el nene de la mano de su madre espera cruzar
la avenida, pero vos esperas más, todos los segundos son muchos, demasiados. Y
si a todo eso le sumas todo el proceso que llevaría empezar a conocer a alguien
pensas que aun estas lejos, lejos del objetivo final. Cuando llegas a casa para
desconectarte, miras todo lo que anduviste y lo que tenes y cuesta, cepillas
los dientes y acostado pensas, tantos sueños y tantas ganas llevan a no poder
conciliar el sueño. A veces pensas en que vas a despertar y vas a tener al lado
a la dueña de tus mañanas, que por un arte de magia se salteo toda la introducción
y ya son uno más uno. Y así te volviste a dormir, el cansancio te gano, que
lindo seria abrir los ojos y saber que ya son dos en el pasto, bajo el sol
riendo...
Gustavo Girardi
sábado, 25 de octubre de 2014
Ahora pasa que las
tortugas son grandes admiradoras de la velocidad, como es natural. Las
esperanzas lo saben, y no se preocupan. Los famas lo saben, y se burlan. Los
cronopios lo saben, y cada vez que encuentran una tortuga, sacan la caja de
tizas de colores y sobre la redonda pizarra de la tortuga dibujan una
golondrina.
Julio Cortazar (Historia de cronopios y de famas)
Escribir sin pretextos. Las cosas son así, todos los
recuerdos vuelven y se hacen presentes en el momento que menos lo imaginamos.
¿Por qué hay que pensar en lo que paso hace tanto, ¿por qué este día presos de
este sol tan lindo? Esta y tantas preguntas que no tienen respuestas o si.
Andarán flotando en el aire. El aire donde vuelan las mariposas que alegran a
los cronopios, estos sacan sus sueños a volar y transforman las mariposas en
flores y las regalan a cuanta señorita sonríe bajo el sol, y pasan las horas
convirtiendo mariposas y regalando flores, todos los soles en un día, todo el
día bajo un mismo sol. Y los famas miran asombrados con lo poco que se hacen
feliz los cronopios y asombrados intentan entender y no comprenden la finalidad
de amar. Y al caer el sol todas las flores estarán en la casa de cuanta
señorita y el cronopio volvio a guardar sus sueños y silbando bajito vuelve a
casa sonriendo por cada vez que se acuerda de las sonrisas que archivo en su
mirada.
Gustavo Girardi
jueves, 23 de octubre de 2014
FELIZ CUMPLE CHARLY!
El ángel vigía. Es larga la carretera cuando uno mira atrás, porqué
tenemos que ir tan lejos para estar acá. Quiero verte la cara, adoro la
teletransportación. Y aunque cambiemos de lugar las banderas, siempre es
como la primera vez. No quiero más que me des con cuenta gotas tu amor.
Quiero verte desnuda el día que desfilen los cuerpos que han sido
salvados. Desprejuiciados son los que vendrán, y los que están, ya no me
importan más. Te encontraré una mañana, y prepararás la cama para dos.
lunes, 20 de octubre de 2014
Guardar amor: El acto por el cual una dosis de amor se
mantiene todavía sin ver la luz, resegada en un rincón de nuestro ser,
esperando el momento de encontrar, encontrar otro ser que espera recibir la
caricia y el cuidado infinito. Y todos los días como en un simple acto de
ponerse los zapatos, cebar un mate o cepillarse los dientes; pensar en esa otra
persona, todavía imaginaria, todavía sin nombre propio, reposa en el sueño el
amor y la misma pregunta ¿Encontraría a la Maga?
Gustavo Girardi
jueves, 9 de octubre de 2014
Comandante Che Guevara
Es tan linda esta foto querido Ernesto, a la sociedad y al
mundo le faltan personas como vos. Hoy se cumplen 47 años de tu muerte, de tu
asesinato. Se debería recordar a tu persona con todos los honores. Héroe. Sos
un grande querido Comandante. Nos dejas la enseñanza de que pueden las personas
morir, pero las ideas quedan, tras tu muerte quedo la leyenda, el propósito, el
ejemplo, las ideas, los hechos, en fin todo, grabado en la piel revolucionaria
de todo aquel que siente una injusticia por un hermano en el mundo. Te
recordare hoy y siempre!
jueves, 4 de septiembre de 2014
Mis últimos tweets fueron frases de Cortazar y frases de
Cerati. Mi ultimo estado en facebook fue una parte de una canción de Cerati y
puse estoy escuchando a Gustavo Cerati. Mi estado de whats app es una frase de
Cerati. Hoy a la mañana mientras pintaba, cantaba por dentro “Té Para Tres” el
tema de Gustavo que tanto aprecia su mamá, dijo tantas veces que era su canción
favorita. Y cerca de las dos de la tarde cuando cruzaba para venir a mi casa
con un tablón de madera en la mano, tal Horacio Oliveira…después de entrar,
recorrer el pasillo y entrar a casa, en la televisión se leía “Murió Gustavo
Cerati” Pienso que todo teníamos que estar pensando en vos para darte fuerzas y
pienso que todos estábamos pensando en vos cuando dijiste Adiós! Todo se
relaciona o se complementa, Rayuela, Cortazar, el tablón, Cerati, que yo piense
en vos, hoy los premios Gardel a la música, signos, signos, signos..Te voy a
extrañar en la Cuidad
de la Furia, te
veré volver en un Lago en el Cielo. Gracias totales!
martes, 26 de agosto de 2014
Cien años de un Cronopio que logro formar un jardín en el alma de cada uno de sus lectores, de esa piedrita inevitable en el zapato que nos molesto de la mejor forma, para estar con él por siempre, jugando como niños a la rayuela. Desde la tierra, hasta escalar número a número para llegar al cielo. Lugar desde donde nos mira, hace ya varios años, admirar su poesia y sus obras eternas en cada rincón del planeta. Sitios donde los cronopios juegan y sueñan y cada uno dentro de sus rumbos espera encontrar una flor para formar su propio jardín.
viernes, 22 de agosto de 2014
viernes, 15 de agosto de 2014
Me estoy atando los zapatos, contento, silbando, y de pronto la infelicidad. Pero esta vez te pesqué, angustia, te sentí previa a cualquier organización mental, al primer juicio de negación. Como un color gris que fuera un dolor y fuera el estómago. Y casi a la par ( pero después, esta vez no me enganás) se abrió paso el repertorio inteligente, con una primera idea explicatoria: "Y ahora vivir otro día, etc." De donde sigue: "Estoy angustiado porque.. etc."
Las ideas a vela, impulsadas por el viento primordial que sopla desde abajo (pero abajo es sólo una localización física). BAsta un cambio de brisa (¿pero qué es lo que cambia de cuadrante?) y al segundo están aquí las barquitas felices, con sus velas de colores. "Después de todo no hay razón para quejarse, che", ese estilo.
Me desperté y vi la luz del amaneer en las mirillas de la persiana. Salía de tan adentro de la noche que tuve como un vómito de mí mismo, el espanto de asomar a un nuevo día con su misma presentación, su indiferencia mecánica de cada vez: conciencia, sensación de luz, abrir los ojos, persiana, el alba.
En ese segundo, con la omnisciencia del semisueño, medí el horror de lo que tanto maravilla y encanta a las religiones: la perfección eterna del cosmos, la revolución inacabable del globo sobre su eje. Náusea, sensación insoportable de coacción. Estoy obligado a tolerar que el sol salga todos los días. Es monstruoso. Es inhumano.
Antes de volver a dormirme imaginé (vi) un universo plástico, cambiante, lleno de maravilloso azar, un cielo elástico, un sol que de pronto falta o se queda fijo o cambia de forma.
Ansié la dispersión de las duras constelaciones, esa sucia propaganda luminosa del Trust Divino Relojero.
Julio Cortázar, Rayuela. Cap. 67.
Las ideas a vela, impulsadas por el viento primordial que sopla desde abajo (pero abajo es sólo una localización física). BAsta un cambio de brisa (¿pero qué es lo que cambia de cuadrante?) y al segundo están aquí las barquitas felices, con sus velas de colores. "Después de todo no hay razón para quejarse, che", ese estilo.
Me desperté y vi la luz del amaneer en las mirillas de la persiana. Salía de tan adentro de la noche que tuve como un vómito de mí mismo, el espanto de asomar a un nuevo día con su misma presentación, su indiferencia mecánica de cada vez: conciencia, sensación de luz, abrir los ojos, persiana, el alba.
En ese segundo, con la omnisciencia del semisueño, medí el horror de lo que tanto maravilla y encanta a las religiones: la perfección eterna del cosmos, la revolución inacabable del globo sobre su eje. Náusea, sensación insoportable de coacción. Estoy obligado a tolerar que el sol salga todos los días. Es monstruoso. Es inhumano.
Antes de volver a dormirme imaginé (vi) un universo plástico, cambiante, lleno de maravilloso azar, un cielo elástico, un sol que de pronto falta o se queda fijo o cambia de forma.
Ansié la dispersión de las duras constelaciones, esa sucia propaganda luminosa del Trust Divino Relojero.
Julio Cortázar, Rayuela. Cap. 67.
lunes, 11 de agosto de 2014
DESENCUENTROS
Andar sin vernos por una ciudad, respirando lo toxico del
aire, de un aire por momentos negro del humo del escape de un colectivo, de un
aire que huele a podrido fruto de la acumulación de basura en una esquina,
causa del paro de la empresa recolectora de residuos. Así andamos a contramano,
tu por un lado y yo por el mío. A contramano pisando el charco de una baldosa
floja que acumulo el agua de la lluvia de la noche anterior. La lluvia que te
mojo camino a tu casa, la fría noche de ayer, en la que el viento te voló el
paraguas y saliste corriendo a buscarlo y volviste trayéndolo en la mano, con
las alambres dobladas, refugiándote esas dos cuadras que te separaban de tu
casa, en todo sitio posible. Y yo que pise la baldosa equivocada, la floja de
aquella vereda, la que logro salpicar mi pantalón y me detuvo por unos
instantes a secarlo con el pañuelo que llevaba en mi bolsillo trasero. Ese
freno impidió que llegue a la esquina en el mismo instante que vos pasabas,
cuando te dirigías a la librería en busca de aquel libro que te tenia fascinada
desde hacia días. Y cuando llegue y me debuto el colorado del semáforo solo
quedaba en el aire el aroma a ese perfume que enamoraría a cualquiera,
adolescentes y adultos, niños y ancianos. Aroma que impregno en el aire de la
cuidad por unos segundos una agradable fragancia, antes que la combustión de
los automóviles o el humo del puestito de garrapiñadas que estaba a metros de
ahí lograran que los olores se mezclaran en un todo. En ese momento sentí muy
mío ese aroma, hasta tuve los segundos necesarios para imaginarme la figura de
tal persona. Todo fue un instante y el verde me llevo con el gentío a cruzar la
calle y acercarme a mi oficina, sitio
que me iba a secuestrar y privar por unas horas, hasta las diecisiete horas,
para ser más exactos cuando sea el horario de salida, de quizás encontrarme con
ese alguien. Eran y punto, atrás quedo el saludo a los compañeros de oficina,
la tarde tenia un sol brillante, momento de seguir vagando por las calles hasta
chocarme con ese perfume, pero esta vez no solo con el aroma perdido en el aire
y sin dueño, como algo anónimo y sin paradero, sino con una fragancia
perteneciente a un nombre propio, al de una mujer que vaya a perfumar mis días
de ahora en más.
Gustavo Girardi
sábado, 19 de julio de 2014
lunes, 14 de julio de 2014
demasiada camiseta
A tan solo un partido para que las gargantas queden afónicas
y a solo siete minutos dentro del mismo partido de poder llevar al menos la
definición a la lotería de los penales. Argentina perdió porque Alemania logro
que la pelota tocara la red, muchas ilusiones se derrumbaron en ese instante y
todos nos atragantamos el festejo. En un partido en donde hubo situaciones para
convertir la caprichosa no quiso entrar y ahora solo resta esperar, de poco nos
sirve el consuelo cuando las ganas del festejo y de ver al pueblo feliz el día
de hoy no pueden ser llevadas a cabo. Ayer perdimos, pero se perdió con
dignidad, sin una patada de más, sin grandes reproches entre los jugadores y con
valentía. Podríamos hacer varios
análisis, hubo aciertos y errores, faltaron jugadores, todos somos técnicos,
todos tenemos gustos y soy uno de ellos que tuvo cierta nostalgia a varios que
no fueron convocados, aun así me aferre a los que estaban y los banque, mas aun
en la final. Tampoco me gustaron ciertas posiciones, que ciertos jugadores no
jugaran en sus puestos, lo mantengo y lo mantendría aun en un hipotético titulo
mundial. Argentina que venia (supuestamente) a ofrecer un show de ataque y
contundencia según la mayoría, perdió eso en el desarrollo del propio mundial y
lo que parecía a priori ser su mayor problema (la defensa) termino siendo su
mejor arma. El peso ofensivo se perdió ante las lesiones de Agüero y Di Maria y
ante un Higuain, algo fuera de estado. La defensa se consolido ante el acierto del
cambio del primer central y los ingresos de Biglia y de un volante más en la línea
media, contribuyeron a darle un poder defensivo en base al orden al equipo,
siempre liderado por el gran Masche. Nos fuimos el último día y volvimos sin la
copa, la pelota no quiso o no supimos hacerla entrar en el arco rival, y la
vuelta olímpica se volvió a posponer. Así es este juego, a valorar la medalla y
a seguir pensando que se puede. Pero necesitamos que la medalla se las cuelguen
los que la merecen (los players) y no la dirigencia que solo esta y se cuelga
las medallas de la conveniencia.
Gustavo Girardi
sábado, 14 de junio de 2014
De todos los instrumentos del hombre,
el más asombroso es, sin duda, el libro. Los demás son extensiones de
su cuerpo. El microscopio, el telescopio, son extensiones de su vista;
el teléfono es extensión de la voz; luego tenemos el arado y la espada,
extensiones del brazo. Pero el libro es otra cosa: el libro es una
extensión de la memoria y la imaginación.
Hace 28 años, nos dejaba Jorge Luis Borges.
El alma y el corazón
Tercer puesto en el mundial. Autora de los dos goles del
partido por el tercer puesto. Lesionada y con un dolor terrible. Argentina es
bronce, pero este equipo y esta jugadora son oro. Viejos son los trapos,
historia es Luciana Aymar. Su ultimo partido en un mundial, cerca de su retiro
y entregando todo, el alma y el corazón, el símbolo de un equipo que adquiere
valores gracias al ejemplo de personas que agigantan a la selección. Me pongo
de pie ante esta dotada, ante la persona más impresionante que brindo el hockey
mundial. Y me pongo de pie y me emociono hasta las lagrimas por un grupo de
jugadoras así, terceras carajo! Pero campeonas del alma!
Gustavo Girardi
domingo, 8 de junio de 2014
miércoles, 4 de junio de 2014
“Me estoy atando los zapatos, contento, silbando, y de pronto la infelicidad.
Pero esta vez te pesqué, angustia, te sentí previa a cualquier organización
mental, al primer juicio de negación. Como un color gris que fuera un color
[...] medí el horror de lo que tanto maravilla y encanta a las religiones: la
perfección del cosmos, la revolución inacabable del globo sobre su eje,
náusea, sensación insoportable de coacción...” (Cortázar, 1996: 304)
Pero esta vez te pesqué, angustia, te sentí previa a cualquier organización
mental, al primer juicio de negación. Como un color gris que fuera un color
[...] medí el horror de lo que tanto maravilla y encanta a las religiones: la
perfección del cosmos, la revolución inacabable del globo sobre su eje,
náusea, sensación insoportable de coacción...” (Cortázar, 1996: 304)
sábado, 31 de mayo de 2014
las dos cosas
me fui derepente a ningún lugar- quería salir y respirar- y antes de dormir pensar mucho en nosotros dos- y escribir dos veces la misma canción- podría soñar el mismo sueño que ayer- estaba todo tan claro que no lo quise entender- entre recordar y entre olvidar me quedo con las dos cosas- no podemos hablar de dolor pero podemos cantar de dolor- mientras afuera cualquiera es tan frágil- sos muy buena me rompiste el corazón y no me dí cuenta- y antes de dormir pensar mucho en nosotros dos- y escuchar dos veces la misma canción- no podemos hablar de dolor pero podemos cantar de dolor- cuando mientras afuera cualquiera es tan frágil- sos muy buena me rompiste el corazón y no me dí cuenta- creí que podía volar y no y con tu inociencia-
andrés calamaro
me fui derepente a ningún lugar- quería salir y respirar- y antes de dormir pensar mucho en nosotros dos- y escribir dos veces la misma canción- podría soñar el mismo sueño que ayer- estaba todo tan claro que no lo quise entender- entre recordar y entre olvidar me quedo con las dos cosas- no podemos hablar de dolor pero podemos cantar de dolor- mientras afuera cualquiera es tan frágil- sos muy buena me rompiste el corazón y no me dí cuenta- y antes de dormir pensar mucho en nosotros dos- y escuchar dos veces la misma canción- no podemos hablar de dolor pero podemos cantar de dolor- cuando mientras afuera cualquiera es tan frágil- sos muy buena me rompiste el corazón y no me dí cuenta- creí que podía volar y no y con tu inociencia-
andrés calamaro
martes, 20 de mayo de 2014
.no se adaptan al frío.
El frío no es amigable de la lluvia, como tampoco lo es con
la soledad. El cuerpo daba vueltas por la casa, sin encontrar un sitio aun sin
explorar, no encontraba lugar donde se hallara la solución para su
aburrimiento. Encima la lluvia de afuera impedía que por unas horas la pelota
lo traslade a otro mundo. Así que era pensar tras pensar, ya había pasado horas
leyendo, que podría encontrar ahora para su divertimento? Se sentó a escribir,
quizás pensando que alguien, en algún lugar lo iba a leer. Se sentó entonces a
escribir, pensando que era otra forma más de seguir.
gustavogirardi
domingo, 18 de mayo de 2014
Todavía no nos encontramos. Aca estoy sentado, esperando.
Todavía la garganta ronca de ayer y la piel roja maltrecha por el frío, los
primeros pelos de una barba que nace un día domingo y el correr del tiempo sin
aun imaginarte, sin aun saber como serás. Los brazos necesitados de abrazar
todavía esperan, cada día cuesta más. Necesitan dar esa caricia y la espalda
necesita esa palmada en la espalda, esa mano que acaricie; en un abrir y cerrar
de ojos todavía se sueña con ese mimo al alma. Y mientras tanto, todavía no nos
encontramos.
Gustavo Girardi
sábado, 10 de mayo de 2014
sábado, 26 de abril de 2014
EL IDOLO
(Eduardo Galeano)
Y un buen día la diosa del viento besa el pie del
hombre, el maltratado, el despreciado pie, y de ese beso nace el ídolo
del fútbol. Nace en una cuna de paja y choza de lata y viene al mundo
abrazado a una pelota.
Desde que aprende a caminar, sabe jugar. En sus años tempranos alegra los potreros, juega que te juega en los andurriales de los suburbios hasta que cae la noche y ya no se ve la pelota, y en sus años mozos vuela y hace volar en los estadios. Sus artes malabares convocan multitudes, domingo tras domingo, de victoria en victoria, de ovación en ovación.
La pelota lo busca, lo reconoce, lo necesita. En el pecho de su pie, ella descansa y se hamaca. Él le saca lustre y la hace hablar, y en esa charla de dos conversan millones de mudos. Los nadies, los condenados a ser por siempre nadies, pueden sentirse álguienes por un rato, por obra y gracia de esos pases devueltos al toque, esas gambetas que dibujan zetas en el césped, esos golazos de taquito o de chilena: cuando juega él, el cuadro tiene doce jugadores.
-¿Doce? ¡Quince tiene! ¡Veinte!
La pelota ríe, radiante, en el aire. Él baja, la duerme, la piropea, la baila, y viendo esas cosas jamás vistas sus adoradores sienten piedad por sus nietos aún no nacidos, que no las verán.
Pero el ídolo es ídolo por una rato nomás, humana eternidad, cosa de nada; y cuando al pie de oro le llega la hora de la mala pata, la estrella ha concluído su viaje desde el fulgor hasta el apagón. Está ese cuerpo con más remiendos que traje de payaso, y ya el acróbata es un paralítico, el artista una bestia:
-¡Con la herradura no!
La fuente de la felicidad pública se convierte en el pararrayos del público rencor:
-¡Momia!
Desde que aprende a caminar, sabe jugar. En sus años tempranos alegra los potreros, juega que te juega en los andurriales de los suburbios hasta que cae la noche y ya no se ve la pelota, y en sus años mozos vuela y hace volar en los estadios. Sus artes malabares convocan multitudes, domingo tras domingo, de victoria en victoria, de ovación en ovación.
La pelota lo busca, lo reconoce, lo necesita. En el pecho de su pie, ella descansa y se hamaca. Él le saca lustre y la hace hablar, y en esa charla de dos conversan millones de mudos. Los nadies, los condenados a ser por siempre nadies, pueden sentirse álguienes por un rato, por obra y gracia de esos pases devueltos al toque, esas gambetas que dibujan zetas en el césped, esos golazos de taquito o de chilena: cuando juega él, el cuadro tiene doce jugadores.
-¿Doce? ¡Quince tiene! ¡Veinte!
La pelota ríe, radiante, en el aire. Él baja, la duerme, la piropea, la baila, y viendo esas cosas jamás vistas sus adoradores sienten piedad por sus nietos aún no nacidos, que no las verán.
Pero el ídolo es ídolo por una rato nomás, humana eternidad, cosa de nada; y cuando al pie de oro le llega la hora de la mala pata, la estrella ha concluído su viaje desde el fulgor hasta el apagón. Está ese cuerpo con más remiendos que traje de payaso, y ya el acróbata es un paralítico, el artista una bestia:
-¡Con la herradura no!
La fuente de la felicidad pública se convierte en el pararrayos del público rencor:
-¡Momia!
A veces el ídolo no cae entero. Y a veces, cuando se rompe, la gente le devora los pedazos.
sábado, 5 de abril de 2014
No puedes negarlo y el tiempo pasó
y aun estamos extraños cuando nos miramos los dos.
Aunque no te vea, te imagino
doy abrazos al viento invocando a tu figura.
No puedes negarlo aun recuerdo tus ojos
recuerdo un te quiero que escuche de tu voz.
Y no me digas que no te diste cuenta
cuando te mire aquel día.
Y no me digas que no te diste cuenta
cuando te mire aquel día.
Cuando me viniste a saludar, no ocultes la verdad
es verdad, me atrapo tu figura
archive tu silueta en mis pupilas
me guarde tus besos y caricias
te busque y aun lo sigo haciendo
pero no encontré otra como tú.
Y no me digas que no te diste cuenta
Cuando te mire aquel día.
Y no me digas que no te diste cuenta
Cuando te mire aquel dia, no me digas que no.
Gustavo Girardi
AMAR SIN NADIE
Y decirte que te extraño sonaría un poco cursi y decirte que
te quiero tal ves un poco más y decirte que te pienso ¿como sonora? Que te
necesito aca bien cerca para poderte abrazar, para respirar lo mismo que
respiras y para mirarte al hablar. Extrañarte es una debilidad, que solo se
alivia cuando podemos hablar, quererte un sentimiento que florece cuando te
tengo a la par.
Gustavo Girardi
miércoles, 2 de abril de 2014
lunes, 31 de marzo de 2014
viernes, 21 de marzo de 2014
jueves, 13 de marzo de 2014
Estoy implicado en un tiempo complicado
tal vez por mi falta de compromiso.
No escuché el primer aviso
y tuve una oportunidad
y no la supe aprovechar.
Formo parte de una sociedad secreta
que todos conocen
de hombres fracasados
pero pueden disimular,
no sabemos cambiar
aunque a veces tenemos un hogar.
Nos vamos y nos abandonan a la vez
y a veces intentamos sobrevivir
a la vida definitiva
pero no servimos
para eso estamos presos de nuestra libertad.
Y poder elegir
nos hacen sufrir
y ahora necesitamos nos queremos
pero queremos ser amados y nos tratamos mal
o también te da igual.
Esa es mi exclusiva secreta que todos conocen
de hombres fracasados
que no saben disimular
pero no podemos cambiar
aunque a veces tengamos hora
tal vez por mi falta de compromiso.
No escuché el primer aviso
y tuve una oportunidad
y no la supe aprovechar.
Formo parte de una sociedad secreta
que todos conocen
de hombres fracasados
pero pueden disimular,
no sabemos cambiar
aunque a veces tenemos un hogar.
Nos vamos y nos abandonan a la vez
y a veces intentamos sobrevivir
a la vida definitiva
pero no servimos
para eso estamos presos de nuestra libertad.
Y poder elegir
nos hacen sufrir
y ahora necesitamos nos queremos
pero queremos ser amados y nos tratamos mal
o también te da igual.
Esa es mi exclusiva secreta que todos conocen
de hombres fracasados
que no saben disimular
pero no podemos cambiar
aunque a veces tengamos hora
Presos de nuestra libertad
de aquellos presos
...aquellos besos.
de aquellos presos
...aquellos besos.
A.C.
viernes, 21 de febrero de 2014
viernes, 14 de febrero de 2014
Hace demasiados meses que mis payasadas no provocan tus ganas de reir. No es que ya no me intereses pero el tiempo de los besos y el sudor, es la hora de dormir. Duele verte removiendo la cajita de cenizas que el placer tras de si dejó, mal y tarde estoy cumpliendo la palabra que te di cuando juré escribirte una canción. Un dios triste y aburrido nos castigó, por trepar juntos al árbol y atracarnos con la flor de la pasión, por probar aquel sabor. El agua apaga el fuego y al ardor los años, amor se llama el juego en el que un par de ciegos juegan a acerse daño. Y cada vez peor y cada vez más rotos y cada vez más tú y cada vez más yo, sin rastro de nosotros. Ni inocentes, ni culpables. Corazones que destroza el temporal, carnes de cañón. No soy yo ni tú ni nadie, son los dedos miserables que le dan cuerda a mi reloj. Y no hay lágrimas que valgan para volver a meternos en el coche, donde aquella noche en pleno carnaval, te empecé a desnudar. El agua apaga el fuego y al ardor los años, amor se llama el juego, en el que un par de ciegos juegan a acerse daño y cada vez peor y cada vez más rotos y cada vez más tú y cada vez más yo, sin rastro de nosotros.
jueves, 13 de febrero de 2014
Y comprendió que era mejor reír, y comprendió que era mejor
olvidar. Y cargo todos los sueños en su corazón y sonrió. Sonrió día tras día,
sonrió al sol cuando el primer rayo de luz asomaba por la ventana, al día
cuando cruzaba la frontera de la puerta, sonrió al trabajo y a la rutina. Sonrió
a los lindos momentos, como así también supo tomar con calma los no tan buenos.
Sonrió también en su vuelta a casa, cuando el sol le dejaba el paso a la luna y
sonrió cuando nuevamente su cuerpo se deposito en la cama. Y realizo un acuerdo
coexistencial con el tiempo. Ni este lo iba a perseguir, ni él huir del tiempo.
Y sonrió nuevamente sabiendo que un día se encontrarían.
G.Girardi
miércoles, 12 de febrero de 2014
La vida no siempre sale como la planeamos y los sueños no
llegan cuando los necesitamos. Sentir, sentir esa angustia en el alma. Sentir
esa falta, necesitar ese abrazo, ese mimo al alma. Necesitar la sonrisa cuando
nos dormimos pensando en ella y abrimos los ojos y sonreímos a la mañana
sabiendo que tenemos ese motivo para tener el corazón en orbita. Una atmósfera
de alegría estamos esperando, pero todo parece estar cubierto de nubes que no
dejan lugar al sol. A un sol que estamos esperando hace rato, para que pinte nuestros días de colores.
viernes, 24 de enero de 2014
Sensible, esa palabra tendría que definir para explicar lo
que siento en el día de hoy. Hay dos maneras de poder definirla. La primera
buscar en el diccionario el significado. La segunda es explicar lo que pasa por
mi mente, mi corazón y mi alma en este momento. Prefiero elegir la segunda.
Paso a contarles. Hoy me encuentro con todas las sensaciones encontradas,
sabiendo que en días parto rumbo al norte en un viaje que soñé desde siempre. Y
al mismo tiempo con la sensibilidad de una mezcla de emociones y dudas. La
emoción de poder viajar, de conocer nuevos lugares, costumbres, personas. Y al
mismo tiempo la duda por lo que implica viajar solo. Pero como dice León hay
que sacudir al tiempo, y no pretendo quedarme parado cuando se puede caminar
hacia los sueños. Pero es verdad hoy estoy sensible, en el fondo viajar solo me
va a traer recuerdos. Pero supongo que me va a hacer crecer como persona,
abrirme al mundo y las nuevas experiencias. Por otra parte se debe ser feliz y
la primera felicidad es encontrarse a uno mismo y lograr la felicidad interior.
Espero que los días y los kilómetros me traigan mucha felicidad… Partí
lunes, 20 de enero de 2014
martes, 7 de enero de 2014
Tengo el corazón abierto, todo el mundo puede ver un camino para correr. Tengo el alma en un desierto, todo el mundo puede ser un camino para crecer. Todo el mundo dice que mi amor es en vano y que llevo siglos esperando nacer, esperando nacer. Yo te he visto en el pasado, con tu cara de jarrón y tu mundo hecho de clisés, que esperás ahí al costado del camino, no escuchaste esta canción todo el mundo te quiere ver. Tengo la esperanza de encontrar un sonido y un amor tan grande que te pueda envolver, por Dios escuchame. Te imaginas el lamento de la gente y su manual de las cosas que nunca fueron y el olor de los jazmines viejos y la angustia sensación de que el tiempo se echó a perder. Soy un solitario transmitiendo un mensaje, escribiendo frases para poder creer, esperando nacer, esperando nacer, esperando nacer, esperando nacer.
lunes, 6 de enero de 2014
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Una mañana atipica la de este viernes, caminando el viento me golpeaba en la cara y me recordó una frase: " Me gusta el viento. No s...
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Casa de la Américas, mi casa. ¿Sabrá el pájaro que nació cubano? ¿Sabrá el sol que ilumina el malecón y quema las gargantas sedi...